Por Anahí Alburqueque
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Desde que empezó la cuarentena hemos seguido trabajando de la mano con nuestros clientes, formamos diversos comités que nos han permitido observar y contribuir a que estas empresas con las que trabajamos se reinventen y resurjan con nuevos productos y servicios, con nuevas formas de trabajo. Hemos visto su capacidad para afrontar una situación adversa y plantear oportunidades innovando, comprometiendo a su gente y trasmitiendo esperanza y positivismo.
Es alentador ver como existen empresas que ya están trabajando para su retorno a través de tiendas virtuales, servicios delivery o plataformas digitales, ha sido un reto trasladar el trabajo a casa, intentar cambiar la concepción de “cantidad de horas de trabajo” por “trabajo por objetivos”, pero se está logrando, la capacidad de reinventarse del empresario peruano es impresionante, y aunque no es fácil adaptarse a las nuevas circunstancias, el trabajo en equipo, la colaboración de una mirada externa y mantener el compromiso de la gente ha sido fundamental para que estos comités estén consiguiendo resultados en el corto plazo.
En el transcurso de estos 38 días hemos participado de talleres de innovación, directorios virtuales, comités de emergencia, consejos directivos, y elaboración de artículos de manera continua; buscamos transmitirles nuestro conocimiento y experiencia, y estamos gratamente sorprendidos de como en algunos casos se han dejado de lado las diferencias familiares y se trabaja como un puño, todos unidos; hemos visto también como los directorios virtuales han permitido a las empresas tomar las reservas del caso, girar el timón y tomar acciones de corto plazo, para enfrentar las nuevas circunstancias.
La experiencia de estas semanas nos ha permitido comprobar gratamente como las empresas familiares, están manejando la difícil situación económica, esforzándose en descubrir las oportunidades que toda crisis trae consigo y sobretodo manteniendo la confianza y compromiso de sus colaboradores. Superar la crisis es un reto difícil e incierto, que requiere voluntad, innovación y organización; además de ser un proceso de aprendizaje que estamos compartiendo con nuestros clientes.